R. Díaz Maderuelo - J. M. García Campillo - C. G. Wagner - L. A. Ruiz Cabrero - V. Peña Romo - P. González Gutiérrez

Estrategias reproductivas

Por estrategias reproductivas se entienden todas aquellas actividades y conductas cultural y socialmente pautadas que influyen de forma directa o indirecta en una regulación del crecimiento de la población. Normalmente están al servicio de las prácticas propias de un modo de reproducción determinado, justificándolas, legitimándolas u ocultándolas, por medio de sanciones y procedimientos ideológico-religiosos, filosóficos, jurídicos, médicos o consuetudinarios de gran poder normativo.

1) Prácticas que afectan indirectamente a la fecundidad:

Sexualidad no reproductiva.
Celibato.
Edad por sexos del matrimonio.
Situación jurídica y social de los hijos extramatrimoniales.


2) Prácticas que afectan directamente a la fecundidad mediante el control de la natalidad:

Diversas formas y métodos de contracepción.
Tabúes postmaritales.
Espaciamiento de la frecuencia de los coitos.
Prolongación de la lactancia (asociada a dietas ricas en proteinas y escasas en grasas e hidratos de carebono)


3) Prácticas que afectan directamente a la demografía mediante el control de la mortalidad:
Aborto.
Infanticidio:
- Sistemático/esporádico.
- Manifiesto/encubierto.
- Selectivo/generalizado.
Guerra.
Prácticas magico/religiosas desviantes.

Por todo ello, será sumamente importante el esclarecimiento de las pautas conductuales que, reforzadas por medios religiosos, filosóficos, jurídicos, médicos o de costumbre, hacen posible la ocultación de los objetivos de las prácticas comprendidas en los epígrafes anteriores. Por otra parte, en una sociedad determinada, suele darse una determinada combinación de varias de ellas, que puede cambiar según los sectores y grupos sociales, y que está motivada por las presiones demográficas y las tensiones reproductivas a que son sometidos. Así, podremos encontrar, por ejemplo, una gran profusión de prácticas sexuales no reproductivas, combinada con ciertas formas de celibato, uso esporádico de contraceptivos y abandono preferencial de niñas, como ocurría en algunos lugares de la Grecía clásica.

Llama poderosamente la atención, la universalidad del infanticidio, en sus diversas variantes, y del abandono de niños (que no es sino una forma de infanticidio inconcluso), lo que supone una no muy elevada efectividad de las diversas prácticas contraceptivas, ya que finalmente las mujeres concebían hijos no deseados, y el hecho de que sean preferidos frente al aborto, ya que, actuando sobre un neonato o un niño de corta edad, no se pone en peligro la vida de la madre.

Especial interés merece, además, la definición que cada sociedad realiza de “muerte natural”, “enfermedad infantil”, “dolencias propias de los recién nacidos” así como el conjunto de atenciones que requieren los niños, a menudo muy diferentes según el sexo, y las mujeres gestantes, ya que pueden ocultar prácticas inconscientes, pero efectivas, que incrementan la mortalidad.